¿Alguna vez quisieron teletransportarse a alguna película de Disney? Si al ver la Bella y la Bestia lo hicieron, con venir a esta región pueden cumplir su deseo ya que fue en uno de estos pueblos en los que se inspiraron para hacer la película y cada uno de los rincones de esta región es tan mágico y colorido, que tiene un encanto de cuento de hadas.
Alsacia es una región en el noreste de Francia, justo en la frontera con Alemania y Suiza, que a través de los años y fruto de las guerras, ha pasado de ser territorio alemán y francés en muchísimas ocasiones, lo que le ha dado como resultado que sea una región con pueblos de mil colores y con una vida increíble, una arquitectura única, una gastronomía y cultura que no se encuentra en ninguna otra parte.
Para recorrer esta región la mejor opción es hacer el recorrido en carro particular e idealmente hospedarse en uno de los pueblos que quede en la mitad del camino y dedicarle una noche como mínimo a Estrasburgo.
Para la parte rural, les recomiendo hospedarse en el hotel Clos St Vincent, que queda justo en las afueras de Ribeauville (en la mitad del recorrido) en una colina en medio de un viñedo, con las mejores vistas y unos atardeceres de película. Si esto no es lo que tienen en mente, pueden hospedarse en Colmar.

Saliendo del viñedo del hotel. El hotel rodeado de viñedos
Para Estrasburgo les recomiendo hospedarse cerca de la catedral o en la zona de Petite France, ambos lugares hermosos y centrales. Un hotel bueno y barato es el BOMA.
Los 7 lugares que no se pueden perder en esta Alsacia son:
1. Eguisheim
Lo mejor de este pueblo es que aun teniéndolo en los recomendados, cuando llegan los sorprende por completo, pues al acercarse en el carro no es lindo, tanto que se puede dudar al momento de decidir si bajarse a conocerlo. Una vez toman la decisión de adentrarse en su laberinto caminando, se encuentran con unas calles en círculo que forman unos anillos, diseñadas así para el desarrollo de la economía del pueblo, con casas decoradas de todos los colores y cigüeñas en todos los techos con sus nidos.
Tiene dos plazas super lindas, con restaurantes y con gente tocando música en vivo.
Acá les recomiendo almorzar en el restaurante Edel, y atrévanse a probar el Pot Alsaciano, algo parecido a un sudado colombiano, y delicioso. Si les gusta este almuerzo y quedan antojados de comprar el pot alsaciano de cerámica para llevarlo a su casa, en todo el recorrido lo van a encontrar con mil decoraciones.

Pot Alsaciano. Laberintos llenos de colores.
2. Colmar
Esta es catalogada como la capital de la ruta del vino Alsaciana, pues queda en todo el medio de la ruta oficial, y es precisamente por esto que este lugar, que antiguamente era un pueblo, hoy en día es una ciudad más desarrollada, pero que conserva su centro histórico con sus canales.
No dejen de recorrer Colmar pasando por los siguientes lugares: Rue des marchands fer rouge, Maison pfister, Maison des têtes, La Petite Venise (sin caer en el tourist trap de montar en barca, pues solo da la vuelta a la esquina y vuelve), Ancienne douane, Eglise st Martin, Folklore alsacien.

3. Kayserberg
En medio de un valle estrecho y atravesado por el río Weiss, está este pueblo, que ha sido catalogado en varias ocasiones como el pueblo más lindo de Francia, en donde sus plazas tienen un ambiente animado y sus restaurantes una comida deliciosa, lo que lo convierte en un pueblo perfecto para parar a tomarse un café y disfrutar el ambiente.


4. Riquewihr
Un lugar de película, en este lugar se inspiraron para hacer la Bella y la Bestia. Es un pueblo medieval en el corazón de los viñedos de Alsacia, le dicen la joya de los viñedos. La arquitectura de este lugar es increíble. Aquí mientras caminábamos por las calles y nos deleitábamos con la belleza, nos comimos un crepe de nutella con banano en medio de la colina en la que este se desarrolla. Un pueblo con mucho ambiente.


5. Ribeauville
Uno de los pueblos medievales más antiguos de la región de Alsacia, y que está ubicado entre viñedos y montañas, ya se podrán imaginar el paisaje. Su calle principal, que tiene casas coloridas y decoradas con todo lo que se puedan imaginar, va atravesando plazas llenas de restaurantes y terrazas exteriores, y va en dirección hacia la montaña en donde se encuentran 3 castillos.

Les recomiendo comer en el restaurante italiano (pizzas) L’arbalete.
En el recorrido entre Ribeauville y Obernai hay otros lugares por los que vale la pena pasar en el carro, mas no bajarse: Itterswiller (mini pero hermoso para recorrerlo en el carro), Bergheim y el Château du Haut-Kœnigsbourg (donde la vista es espectacular, tanto que en días muy lindos se ve el Black Forest en Alemania y los Alpes).
Château du Haut-Kœnisbourg, Francia.
6. Obernai
Un pueblo hermoso, pero para serles sincera, los primeros 5 pueblos le ganan a todos. Tiene una calle peatonal llena de restaurantes súper cheveres y una plaza muy linda que mira hacia su iglesia.

Si van a almorzar aquí les recomiendo el restaurante La Halle Aux Bles.
7. Estrasburgo
Estrasburgo es la ciudad capital de Alsacia y su centro está catalogado como patrimonio de la humanidad por la UNESCO, y es que con solo caminar por La Petite Venise y con ver su Catedral, sabrán por qué lo es, pero Estrasburgo es mucho más que esto. Lo que más captó mi atención fue el ambiente que tiene esta ciudad, que al ser una ciudad estudiantil tiene ambiente todos los días de la semana y a la hora que quieran, con mini plazas y muchos bares y restaurantes.
Catedral de Estrasburgo Petite France, Estrasburgo Grand’Rue, Estrasburgo
Para almorzar: La Corde à Linge, pidan las hamburguesas y las ensaladas. Tiene una ubicación privilegiada y hermosa.
Para tomarse algo: Au Petit Bois Vert, que queda al lado del canal.
Para comer: Au Brasseur, una cervecería, para pedir la tarte flambée, la pizza tradicional de Alsacia.
Au Petit Bois Vert, al lado del canal.
Aquí les dejo los lugares importantes para visitar en Estrasburgo: Catedral de Estrasburgo, Place Gutenberg, Rue des Grandes Arcades, Homme de fer – plaza en el centro de Estrasburgo, Place Broglie + Opéra, Place de la République, Gallia, Rue des frères, Petit France, casco antiguo.
Por ultimo, no sobra recomendarles que no tomen la autopista, tomen las vías alternas entre los viñedos, ya que este es parte del recorrido y de la experiencia, y tengan en cuenta que estos son pueblos por lo que alrededor de las 6pm, salvo en Estrasburgo, ya todo esta empezando a cerrar.
Alsacia se robó mi corazón, fue un destino increíble, con mucho por entregar, historia, color y vida. ¿Qué tal si planeamos un viaje a esta gran ruta de vinos, pueblos y castillos?